La Dirección de Cultura Ciudadana de la Secrearía de Cultura, Recreación y Deporte adelanta en el sector de El Verjón una acción de cuidado para el ciclismo recreativo que genera aglomeración de deportistas. ¿Cómo logró una ciudad de 9 millones de habitantes transformar sus hábitos de movilidad? ¿Qué retos enfrenta hoy? Estudios del Observatorio de Culturas ofrecen respuestas.
Una Bogotá más dispuesta a moverse en bici. Una Bogotá más consciente de la importancia del auto y mutuo cuidado en tiempos de pandemia. Una Bogotá que acogió con cultura ciudadana las medidas de protección básicas en tiempos de Covid-19: uso del tapabocas, lavado de manos y distanciamiento físico.
Esos son algunos de los resultados que se desprenden de las encuestas, sondeos y actividades con grupos focales liderados por el Observatorio de Culturas de la Dirección de Cultura Ciudadana de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, SCRD.
Acciones desarrolladas desde el 17 de marzo hasta septiembre de este año, que buscaban hacer seguimiento y medir el impacto en la comunidad de ese llamado a la acción de cuidado colectivo propuesto por la Alcaldesa de Bogotá, Claudia López, para contrarrestar los efectos del coronavirus en la ciudad.
La estrategia de la Alcaldía Mayor combinó medidas legales de regulación y control de horarios de salida, movimiento y turnos para ir de compras o realizar domicilios; cierres parciales de fronteras de la ciudad y localidades.
Todo esto con apenas tres reglas básicas de precaución: lavar siempre las manos y de forma repetida, combinada con el uso de líquidos desinfectantes en superficies; usar el tapabocas de manera constante en el espacio público; y tomar distancia física en calle y espacios cerrados con desconocidos.
“Esa narrativa de auto y mutuo cuidado resonó en 7 millones de personas que en Bogotá se quedaron en casa durante cerca de 3 meses; y luego un 65% en promedio en la medida en que la ciudad fue reactivándose económica y socialmente”, explica Nicolás Montero, Secretario de Cultura, Recreación y Deporte.
Agrega que los conteos semanales adelantados por el Observatorio de Culturas muestran que el 96% de los bogotanos usa tapabocas (un 11% lo usa mal) y se lava las manos en lavabos públicos que ofrece la ciudad en distintos puntos.
Para lograrlo, la Dirección de Cultura Ciudadana, a través de su estrategia Alas de Distancia, orientó su pedagogía a través de mensajes que enfatizan los costos familiares, normas sociales positivas e información científica sobre cómo opera el virus. Además de enfatizar la importancia de las acciones individuales de autocuidado para beneficio de la comunidad, especialmente el distanciamiento físico, pues se encontró que un 31% no toma distancia de al menos dos metros.
“Esta estrategia de cultura ciudadana hizo posible una transformación en la manera como los bogotanos conciben la movilidad, volcándose hacia una movilidad más sostenible y una ciudadanía más dispuesta a moverse en bicicleta”, expone Montero.
En una de las preguntas realizadas por el observatorio de cultura se les pregunta a los bogotanos: Si las condiciones de seguridad e infraestructura de las ciclorutas mejoraran, ¿estaría dispuesto a movilizarse principalmente en bicicleta? Un 59% aseguró que sí.
En otra pregunta —¿en qué otro medio de transporte se movilizaría para ir a su trabajo?— el 30% de los consultados respondió que optaría por la bicicleta.
Retos en el futuro
Estos sondeos también evidenciaron algunas tareas pendientes para enfatizar el mensaje del cuidado al momento de transportarnos en bicicleta. De ahí que la estrategia Alas de Distancia entrara en una nueva etapa: Alas para rodar, una acción de cuidado para el ciclismo deportivo y recreativo en la ciudad.
El pasado domingo 27 de septiembre se desarrolló una de esas jornadas en el sector de El Verjón, que convoca a ciclistas que practican este deporte en grupo. Se observó que tanto en el punto de inicio del ascenso al alto (puesto de control policial-desvío Choachí) como en el punto de finalización (Verjón) se presenta una alta aglomeración de ciclistas, siendo especialmente crítica en el punto de finalización y en 2 puntos intermedios (mirador e ingreso a Guadalupe).
El objetivo de este acompañamiento por parte de la Dirección de Cultura Ciudadana es promover medidas de autocuidado para el ciclismo deportivo en puntos estratégicos donde se practica este deporte de manera masiva. La meta entonces es reducir el número de ciclistas en pelotón y aumentar el uso del tapabocas en la interacción personal en la meta del ascenso y los puntos de reposo.